A las 0230 Hs del día 21 de mayo, desde el Puesto Comando del Jefe del
Equipo de Combate Güemes en Puerto San Carlos, se escucha la ejecución
de fuego naval en zona próximo a la altura 234. Se procede a llamar al
Jefe de Sección de apoyo, en altura 234, quien no responde ninguna de
las comunicaciones efectuadas desde la hora indicada hasta las 0600 Hs.
El cañoneo naval se produce en forma discontinua, con variada intensidad durante un lapso de 3 horas.
A las 0810 Hs, con las primeras luces un observador divisa en la entrada
del canal a Puerto San Carlos, un buque blanco de grandes dimensiones
(no es de guerra), seguido por tres fragatas. Los efectivos argentinos
en la zona están constituidos por 1 Sección a órdenes del Jefe E.C.
“Güemes”. Se ha perdido todo contacto con la Sección de apoyo en la
altura 234.
A las 0820 Hs, el Jefe E.C. observa que un lanchón, más grande que los
de desembarco, se desprende del buque blanco hacia el establecimiento
San Carlos: varios helicópteros sobrevuelan los buques. A las 0822 Hs
pueden apreciarse lanchones de desembarco que se desplazan en todas
direcciones.
Inmediatamente el Jefe E.C. Informa la situación al Jefe FT Mercedes.
Quien a las 0830 Hs la retransmite al Comandante de la Agrupación
Ejercito Litoral en Puerto Argentino.
A las 0830 Hs, efectivos enemigos alcanzan la playa y se despliegan
avanzando hacia el Este. Se abre fuego con armas automáticas sobre las
fracciones enemigas.
Se ordena el desplazamiento de las tropas a las posiciones preparadas en
alturas al Este del puerto, para evitar el cerco que pretenden
conformar los infantes ingleses.
Aproximadamente a las 0840 Hs, efectivos caen sobre Puerto San Carlos en
el vacío y, en el mismo instante, por el Este, un helicóptero Sea King
intenta atacar por retaguardia a los efectivos argentinos. Se ejecuta
fuego sobre la máquina enemiga y ésta, muy averiada, se aleja de la
zona.
Los infantes ingleses ejecutan fuego de ametralladoras y morteros, sin
alcanzar las posiciones de la Sección del equipo de Combate Quemes.
Más tarde, un helicóptero Gazelle se aproxima a las posiciones para
hacer fuego con sus cohetes. Se le efectúa fuego reunido con todas las
armas y la máquina se precipita a las aguas de Puerto San Carlos y se
hunde de inmediato. Un cuerpo queda flotando y otro se amarra a una
boya.
Una lancha concurre en su auxilio. El enemigo ejecuta intenso, pero poco
efectivo fuego de morteros. Se observa a los pobladores auxiliando a
las tropas enemigas e inclusive, señalando la zona de repliegue de las
fuerzas argentinas.
Se ejecuta otro cambio de posición, hacia el Este, para eludir el fuego de morteros.
Un helicóptero Gazelle hace fuego con una ametralladora, lanza sus
cohetes, y ataca la posición nuevamente. Se ordena fuego reunido, y la
máquina, incendiada, se precipita a tierra, cayendo a pocos metros de
las posiciones. Se puede comprobar que sus tres tripulantes han muerto.
No cesa el fuego de morteros, aunque es poco efectivo.
Se ejecuta otro cambio de posición. Tres minutos más tarde, el enemigo
envía otro Gazelle, aparentemente para dirigir el fuego naval. Se
ejecuta fuego sobre la máquina y el piloto logra retirarla del lugar,
humeante y seriamente dañada.
Comienza un intenso fuego naval. Continúa el de morteros sobre las
posiciones del equipo de combate Güemes con errores de 100 metros sin
que se pueda localizar la ubicación de los efectivos propios.
Durante el lapso de duración del combate, continúa el desembarco de los
efectivos enemigos. Se observa, también, gran movimiento de lanchones
hacia el establecimiento San Carlos.
Aproximadamente a las 0930 Hs, se detecta la acción de un avión propio
atacando a una fragata enemiga, la que parece quedar averiada. Se desata
un intenso fuego antiaéreo. El enemigo continúa combatiendo por el
fuego (morteros y ametralladoras) con los efectivos propios, pero no
evidencia intención alguna de atacar para conquistar la altura.
Hasta las 1300 Hs, la Sección (2 oficiales, 9 suboficiales y 31
soldados) mantienen su posición, esperando el repliegue de la Sección de
Apoyo (1 oficial, 4 suboficiales y 15 soldados desde la altura 234).
Las bajas provocadas al enemigo son las siguientes: una decena de
paracaidista muertos o heridos, 2 Gazelles derribados (de las dos
tripulaciones hay un solo sobreviviente), 1 Sea King y otros Gazelles
seriamente dañados. Estos últimos quedan, casi con seguridad,
inoperables.
Durante la noche se ejecuta el repliegue hacia Puerto Argentino a través de Co Bombilla y Douglas Paddock.
La marcha se hace sumamente dura pues no se cuenta con abastecimientos,
ni medios de abrigo. Deben enfrentarse la dureza del clima (vientos,
bajas temperaturas y lluvias) y los problemas del desplazamiento a campo
traviesa).
El enemigo trata sistemáticamente de ubicar a las fuerzas argentinas, sin lograr su objetivo.
Se marcha de noche y se descansa de día en situación de combate permanente.
Luego de tres días de marcha casi continua, se llega a la localidad de
Douglas Paddok, donde el Jefe del Equipo de Combate organiza el
racionamiento, higiene y descanso por turnos del personal, y el
reacondicionamiento del armamento.
Operaciones de la Sección de Apoyo del Equipo de Combate Güemes en la defensa de la altura 234-
La Sección Apoyo (2 morteros 81 mm, 2 cañones S/R 105 mm) ocupa la
altura 234, en condiciones de batir, con este fuego, el acceso norte del
estrecho de San Carlos. La fracción está organizada con 1 Grupo de
Pza(s) (constituido por 3 Suboficiales y 5 Soldados que operan las armas
pesadas), y 1 Gpo Fus, que proporciona la seguridad inmediata a las
piezas. Se mantienen comunicaciones por radio con el Jefe EC cada dos
horas, y se establece, complementariamente un camino para el
desplazamiento de estafetas.
A las 0130 Hs, una patrulla de seguridad, adelantada en el sector de la
playa, informa sobre gritos y señales acústicas que se perciben desde el
estrecho. Además, se distinguen siluetas, al parecer de buques, que
penetrar en dirección norte-sur. En ese momento, el Jefe Sección se
adelanta y verifica el ingreso al canal de varios buques.
Inmediatamente intenta comunicarse con su Jefe de Equipo de Combate para
informarle la novedad. Recorre las posiciones, advierte de la situación
y ratifica las misiones alertando al personal sobre la inminente
apertura del fuego.
El radio operador informa que escucha a Jefe EC, pero éste no acusa
recibir ningún mensaje. Se le ordena insistir. La visibilidad es
prácticamente nula, por lo que se abre fuego con 2 proyectiles de
iluminación de morteros, los cuales consiguen poco o nulo efecto. No
obstante, se observa la silueta de buques que se desplazan.
Inmediatamente, se abre fuego con proyectiles explosivos de los cañones
S/R hacia el centro del canal, por no disponerse de medios de
observación y/o detección nocturna.
Se desata un intenso fuego naval desde varios navíos. Este fuego cae
próximo al equipo de comunicaciones, aparentemente localizado por el
enemigo, pero no afecta significativamente el sector ocupado por las
piezas. El Jefe Sección ordena interrumpir la comunicación. A partir de
ese momento ya no habrá de retomar contacto con su Jefe del Equipo de
Combate.
El fuego enemigo comienza a hacerse efectivo, ahora sobre los cañones
S/R, al parecer porque se ha detectado el resplandor de su retroceso. Se
ordena suspender el fuego con los mismos y cambiar de posición.
Mientras tanto, los 2 morteros 81 mm continúan batiendo al enemigo, sin que puedan apreciarse los efectos de su acción.
A las 0330 Hs. el Grupo Morteros agota su munición. Los cañones S/R,
prácticamente, han quedado también sin munición. El fuego enemigo es
cada vez más intenso aunque poco preciso, por los constantes cambios de
posición que ejecuta la sección.
A las 0500 Hs y en cumplimiento del plan de defensa ya elaborado, se
logra desprender la fracción, replegándose hacia las posiciones del
resto del Equipo de Combate al noreste de San Carlos.
Inmediatamente iniciado el desplazamiento, se recibe intenso fuego de
ametralladoras desde una altura ubicada al noreste de la zona de
posiciones. El enemigo, aparentemente, ha desplazado efectivos
aeromóviles y trata de cercar a la fracción. A su vez, el fuego naval se
ha alargado y es efectivo sobre la retaguardia de la fracción. Dos
soldados son alcanzados por esquirlas y resultan heridos.
Impedido de continuar su avance, el Subteniente Óscar Roberto Reyes,
Jefe de Sección con cuatro voluntarios, se adelantan hacia la posición
ocupada por las armas enemigas, para ponerlas fuera de combate.
Se inicia intenso combate por el fuego, lográndose momentáneamente
silenciar las armas enemigas. Esto posibilita que la Sección pueda
reunirse.
Desde la costa, se escucha intenso ruido de motores pertenecientes a vehículos anfibios.
Por las cercanías se percibe también la presencia de numerosos
helicópteros que, al parecer, ejecutan viajes desde las naves hacia las
alturas circundantes. En la cercanías, inclusive, se escuchan voces de
mando.
Comienza a amanecer. Con las primeras luces se puede apreciar la
magnitud de acción enemiga, ya que se observan, en el canal y la Bahía
San Carlos, numerosos buques de guerra y de transporte y otros menores.
La Sección se ha reunido, salvo tres heridos graves, los que por orden
del Jefe de Sección, quedan a cargo de un suboficial que les administra
los primeros auxilios, en una posición protegida.
Nuevamente se intenta comunicación con el Jefe del Equipo de Combate
para transmitir la información que se observa, pero es imposible lograr
dicho contacto. Desde San Carlos se escucha intenso ruido de combate.
Durante el resto del día se permanece en las posiciones, comprobándose
la magnitud de la operación enemiga. Numerosas patrullas aeromóviles
enemigas sobrevuelan insistentemente la zona, sin lograr detectar las
fracción argentina.
En la noche del 21/22 de mayo el Subteniente Reyes, imposibilitado de
transmitir información o accionar sobre el enemigo con posibilidades de
algún éxito y de reunirse con su Jefe del Equipo de Combate, resuelve
iniciar su repliegue hacia el Este.
Durante esa noche la sección, subdividida en patrullas, atraviesa las
líneas que el enemigo ha establecido al este de su cabeza de playa.
Se pierde contacto con una de dichas patrullas. Solamente once hombres logran eludir el cerco.
Se produce una larga y penosa marcha hasta el 11 Junio por el norte de
la Isla Soledad, sin alimentos, ocultándose durante el día y marchando
por la noche. Numerosos efectivos ingleses, en helicópteros, recorren la
zona continuamente. Al parecer, ejecutan exploración y transportan
personal y abastecimiento hacia el Este. Se elude el contacto con los
pobladores. El 14 Junio, en la zona de New House, el Subteniente Reyes y
su fracción son capturados por efectivos ingleses.
El Jefe del Estado Mayor General del Ejercito imparte la orden de
organización inmediata de la Comandancia. Para ello convoca al personal
necesario con AEC, que aún permanece en el continente.
Con las primeras luces, el enemigo efectúa ataques aéreos sobre la
posición. En una de las incursiones quedan destruidos 1 Chinook, 1 Puma y
1 UH 1 H que se encontraban emplazados al E de Monte Kent, en la zona
de reserva.
A las 0830 Hs se recibe la comunicación del Jefe del Equipo de Combate Güemes, a través de Darwin, quien informa:
Que durante la madrugada ha sido bombardeada intensamente por fuego
naval la altura 234, posición con la cual ha perdido todo contacto.
Que observa 4 buques en la bahía, uno de ellos de gran tamaño, del cual se desprenden lanchones hacia la costa.
Que inicia el combate con las fuerzas enemigas.
El Comandante Conjunto ordena la ejecución de exploración aérea con los
medios disponibles. A las 0915 Hs, despega un Aeromachi de la A.R.A. a
cargo del Capitán Owen Crippa. Los Pucará de la Fuerza Aerea no pueden
hacerlo, debido a problemas mecánicos.
El Capitán Owen Crippa regresa a las 1000 Hs e informa:
Ha observado un total de 12 naves de guerra y transporte, en la bahía, que desembarcaban tropas.
Ha descargado sus cohetes sobre una fragata enemiga a la que considera haber averiado seriamente.
A las 1030 Hs se informan los datos obtenidos al CEOPECON en Comodoro
Rivadavia, prometiéndose la acción de la FAE a partir de las 1200 Hs.
Dado que no se han solucionado los problemas mecánicos y porque la
acción aérea del enemigo en la zona es permanente, se hace imposible
lanzar los aviones disponibles en Puerto Argentino.
Se ordena:
Al Jefe
del FT Mercedes, adelantar patrullas hacia alturas al noroeste de cerro
Alberdi. Para establecer contacto con el enemigo y explorar. No se le
pueden asignar helicópteros, pues la intensa acción enemiga hace
imposible desplazar esos medios fuera de la Defensa Aérea de Puerto
Argentino, además no cuentan con instrumental para vuelo nocturno.
Al Regimiento de Infantería 5, adelantar patrullas de observación hacia
Monte Rosalie para reunir información sobre la acción enemiga en San
Carlos.
Al Comandante de la Agrupación Litoral, organizar con los elementos de
Comandos disponibles operaciones de infiltración sobre el dispositivo
del enemigo en San Carlos.
Se solicita al Comando Superior, exploración aérea sobre el dispositivo enemigo en San Carlos, pero la misma no se concreta.
Luego de los exitosos ataques ejecutados por la Fuerza Aérea por la
tarde, en la noche, el enemigo ejecuta un intenso esfuerzo para
desembarcar la masa de sus medios y lanzar elementos de seguridad hacia
las alturas que circundan la cabeza de playa. Se emplean para ese fin,
en forma sucesiva, los helicópteros disponibles.
En la misma tarde, numerosos movimientos son observados transportando
tropas, armas pesadas y de defensa aérea, hacia el noroeste de cerro
Alberdi y hacia alturas al sudoeste de Establecimiento San Carlos y
cerro Montevideo.
El Comando Conjunto Malvinas ha solicitado la continuación del bombardeo
aéreo, no pudiéndose apreciar los resultados obtenidos. Los
requerimientos de fotografías aéreas no pueden ejecutarse por la activa
defensa aérea enemiga.
Fuente: "Informe Oficial - Ejército Argentino".
No hay comentarios:
Publicar un comentario